Los pasatiempos en la tercera edad suelen volverse casi nulos, ya sea por alguna enfermedad crónica como artritis, glaucoma, diabetes, hipertensión, etc., o alguna discapacidad física como fracturas (que son muy frecuentes en la vejez). Sin embargo, ejercitar la mente y el cuerpo es indispensable para llevar una vida plena.
Los adultos mayores que no tienen una rutina o un hobby suelen aburrirse, irritarse con facilidad o deprimirse. Es por eso que debemos tratar de llevar un pasatiempo de acuerdo a sus necesidades y capacidades físicas. En este caso, la lectura resulta un pasatiempo relajante, ya que al leer a un adulto mayor, ejercita su mente poniendo a prueba su imaginación, su sentido del oído y su atención.
Además, la lectura crea lazos entre el cuidador y el adulto, leer a otra persona es un acto de amor y de bondad, es dedicar tiempo a los seres que más queremos, transmitiéndoles nuestra paciencia y comprensión a través de la lectura. La lectura es universal, podemos leer lo que más le guste a nuestro ser querido, y de esta forma entablar una nueva conexión entre ambos.
Algunos de los beneficios de la lectura en el adulto mayor son:
Aumenta la capacidad de concentración.
Al momento de escuchar la lectura, el adulto se sumerge en la historia, en la poesía o en la narrativa, ejercita su mente y con esta, su imaginación. Ayuda a la retención de memoria, a mejorar la atención y sobre todo, a la relajación.
Proporciona entretenimiento
Los adultos mayores tienen menos quehaceres diarios, aumentando la percepción de las preocupaciones. La lectura aporta flexibilidad al introducirse en nuevas historias y aventuras, fomentando la imaginación y la creatividad.
Ayuda a la retención de la memoria
Las emociones ayudan a asentar mejor los recuerdos, por ejemplo ¿recuerdas tu primer beso? ¿qué sentiste? la felicidad, tristeza o enojo encajan en nuestros recuerdos, pues siempre usamos la frase: Me acuerdo que sentí… Bueno, pues la lectura nos aporta emociones. Además al leer o leer a otra persona ejercita sus capacidades cognitivas.
Mejora la calidad de sueño
¿Recuerdas cuando te contaban un cuento para dormir? Con los adultos mayores también funciona, la lectura relaja, destensando los músculos y liberando de estrés al cerebro, proporcionando el estado ideal para conciliar el sueño.
Al leer a un adulto mayor, es regalar lo más importante: tu tiempo, dedicar tiempo es una de las cosas más hermosas que podemos hacer hacer por otro ser humano, leer es gratis, y dedicar una lectura es algo invaluable.